Nos protege la lignocelulosa
Desde hace dos años, el equipo técnico de Super Feed ha confiado en Maxicell, la lignocelulosa condensada de acción nutricional y prebiótica. La investigación de sus propiedades nos descubre ahora otra de sus facetas naturales: la potente acción de captura de micotoxinas en intestino por su configuración envolvente.
La lignocelulosa en la alimentación del toro de lidia permite regresar al origen de la especie en términos de fibra alimentaria y dotar a la alimentación de un sustrato de fibra con lignina, hemicelulosa y celulosa con perfil parecido al que un toro obtendría en un proceso de pastoreo natural.
El uso de material vegetal para el ganado es tan antiguo como la propia ganadería. Y sin embargo algunos nutricionistas han calificado modernamente el uso de la lignocelulosa procesada como una revolución en nutrición animal. La fracción fibrosa de la ración juega un papel preponderante en el equilibrio del tránsito intestinal, especialmente cuando las producciones se exaltan y la genética de los rebaños mejora por su capacidad productiva. La inclusión de fibra vegetal completa mejora el proceso de fermentación en el intestino grueso y estimula el crecimiento del segmento de bacterias beneficiosas, que producen ácido láctico y ácidos grasos de cadena corta, que estimulan la salud del epitelio microvellosidades intestinales y mejoran la reabsorción de agua. Las bacterias benéficas pueblan el colon y el resto de intestino grueso con una lucha activa frente a infecciones intestinales. También se han descrito efectos beneficiosos de la fibra en procesos intestinales vinculados al estrés, la acidosis, los cambios súbitos de dieta, los cambios de forrajes y la ingesta de alimentos contaminados por hongos y micotoxinas.
La lignocelulosa condensada del Maxicell es una fibra completa de origen madera y se usa como fuente de fibra de alta calidad en nutrición de rumiantes con efecto prebiótico. Maxicell es un extracto condensado de lignocelulosa tratada y fermentada dirigida a alimentación animal. Su composición denota un perfil equilibrado en fibras no digestibles y fibras digeribles. Maxicell alcanza un efecto de concentración fibrosa con un aporte equilibrado de lignina más celulosa y hemicelulosa. Su efecto ‘prebiótico’ consiste en que resulta un componente no digerible de los alimentos beneficioso para el toro porque produce estimulación selectiva del crecimiento de uno o varios tipos de bacterias en el colon. El efecto lignocelulosa asegura el desplazamiento al intestino grueso de fermentaciones saludables, que incrementan la microflora intestinal saludable, quien proporciona ácidos grasos esenciales más butírico y láctico favoreciendo así la protección de la mucosa y haciendo de barrera biológica y química a los agentes patógenos reforzando la salud intestinal.
Una de las aplicaciones más exitosas de la inclusión de Maxicell en la dieta de rumiantes es la regulación de la acidosis ruminal. La presencia de alto contenido de hidratos de carbono en las dietas de alta energía llega a provocar fermentaciones desmesuradas en rumen e intestino delgado. Es un cuadro muy conocido en vacas de leche. El uso de lignocelulosa consigue reducir los picos de acido láctico en rumen y traslada parte de la fermentación al intestino grueso, con lo que se consigue una glucomodulación en sangre y una estabilización del ph del rumen. La implantación de sensores de acidez en la redecilla de vacas experimentales nos ha dado diagramas de acidosis siempre por encima del grado pH 5,8 que se considera de riesgo. Así que los núcleos con una dotación suficiente de Maxicell han demostrado equilibrar la fermentación digestiva de las dietas ricas en cereales grano, proteger de forma natural el epitelio intestinal y amortiguar subidas energéticas o cambios bruscos en la ración.